La alimentación de los leones marinos es carnívora. Su dieta está conformada por una extensa gama de opciones que su entorno marino les provee.
Son asiduos consumidores de calamares, pulpos, langostas y una gran variedad de pescados como el salmón, caballa, sardina, pez sable, abadejo, pez plano, merluza, sarpa, pez lanzón, anchoa, bacalao, arenque y tipos de ammodítidos, entre muchos otros. Rayas, cangrejos, y rara vez pequeñas tortugas marinas y pingüinos se incluyen al menú de opciones.
Leones marinos de Steller (Eumetopias jubatus) son capaces de matar y comer focas cuando otro alimento no está fácilmente disponible, pero en un día común se nutren con pulpos, calamares, cangrejos y peces planos, entre otros. El león marino australiano (Neophoca cinerea) consume salmón, langostas, cangrejos de río y pingüinos azules (Eudyptula minor).
Los leones marinos de Steller son capaces de matar y comer focas cuando otro alimento no está fácilmente disponible.
El león marino de Nueva Zelanda (Phocarctos hookeri) prefiere los mejillones, los peces platija, pulpos, cangrejos, rayas y tiburones pequeños. La dieta del león marino de las Galápagos (Zalophus wollebaeki) se basa especialmente en pulpos, pero también la complementan con calamares y sardinas.
El lobo marino sudamericano (Otaria flavescens) es un consumidor oportunista con una amplia variedad de peces bentónicos y pelágicos, muchos de ellos con alto valor comercial, lo que entra en conflicto con empresas pesqueras. Hasta hoy se ha contabilizado 41 tipos de presa que forman parte de esta especie, entre peces, crustáceos, cefalópodos, esponjas y gasterópodos. La merluza y sardina argentina, así como el pulpo rojo, son de sus comidas predilectas. Los lobos marinos de California (Zalophus californianus) se alimentan de más de 50 especies de cefalópodos y peces, siendo los calamares, anchoas, pulpos y arenques algunos de sus favoritos.
Ingieren de 7 a 16 kg de alimento diario, lo que representa del 5 al 8 % de su peso corporal. Los miembros más jóvenes necesitan un 14 % de su peso para mantenerse saludables y alcanzar el tamaño promedio de los adultos.
Ingieren de 7 a 16 kg de alimento diario, lo que representa del 5 al 8 % de su peso corporal.
Pequeñas piedras que se han encontrado en estómagos de leones marinos hacen pensar a los científicos que se trata de métodos efectivos para reducir el hambre durante los períodos de ayuno. Otras teorías señalan que alivian irritaciones causadas por parásitos intestinales o que mejoran el proceso digestivo.
La dentadura de estos pinnípedos consta de 34 a 36 piezas dentales diseñados para sostener con firmeza el alimento y tragarlo entero, acomodándolo correctamente para que pueda deslizarse por la boca. Los caninos solo sirven para capturar y evitar que su bocado resbale. Los dientes traseros planos son ideales para triturar alimentos que contienen conchas duras.
En ciertas profundidades donde la luz del sol no alcanza a iluminar, el entorno se vuelve oscuro, algo que no es problema para estos animales, pues sus vibrisas o bigotes sensibles a los movimientos les indican el camino que deben tomar para encontrar a sus presas.
Están adaptados para realizar buceos profundos donde consiguen más cantidad de peces y calamares de diferentes tipos. Se mantienen dentro de los primeros 180 metros desde la superficie marina por un máximo de 20 minutos, pero esto suele variar dependiendo de la especie. Algunas realizan inmersiones de menos de 100 metros durante cuatro u ocho min solamente.
El agua que consumen proviene directamente del cuerpo de los peces que consumen, pero beben pequeñas porciones en ayunas durante las temporadas de crianza.
El agua que consumen proviene directamente del cuerpo de los peces que consumen.
La alimentación varía ligeramente de acuerdo al género sexual. Se ha encontrado en ciertas especies que los machos se alimentan en mayor porcentaje de especies demersales pelágicas, mientras las hembras consumen principalmente especies bentónicas.
A menudo comen en grupos durante horas nocturnas o crepusculares, que van desde las 9 pm hasta las 6 am aproximadamente. Esta participación grupal ayuda a controlar el movimiento de grandes concentraciones de peces para que sean más fáciles de desorientar y manipular.
Crías
Las crías de león marino tienen un rápido crecimiento gracias a la leche materna que contiene 35 % de grasa. Después de dos a tres semanas de vida, los aún inexpertos están listos para su primer contacto con el agua y para sus primeras lecciones de pesca.
Cautiverio
Los leones marinos en cautiverio son alimentados con caballa, arenque, pámpano, capelán y calamar principalmente.